Estado en que llegó: Desnutrido, problemas de la piel.
¿Sabías que?
Un día nos llegó un reporte a la página de la fundación donde nos indican que un perro talla grande se encontraba encadenado en el frente de una casa y que llevaba días sin pararse pero que seguía vivo. Nos dimos a la tarea de solicitar el apoyo del Centro de Control Animal de Guanajuato, quiénes fueron al domicilio y constataron que el perrito seguía vivo y en pésimo estado, pero también en la parte de atrás de la casa había otros 3 perros, dos tallas chicas y uno talla mediana. Las personas accedieron a entregar de forma voluntaria a todos ellos y ahí es donde comienza la nueva vida de Brandy, en las instalaciones del Ceca se quedó varios días en observación junto con sus hermanos y posteriormente se fue a la Clínica veterinaria para que le realizaran estudios y se quedó internado hasta que estuvo sano y fuerte. Posteriormente Brandy se fue a un hogar temporal por un año donde terminó de recuperarse, para después integrarse a la manada en el santuario, donde el día de hoy ya no está atado a una cadena, sino que vive libre y rodeado de mucho amor.